Oscar

Jeje, gracias Josemari, me ha encantado ese adjetivo de “delicado”.

Lo que no sé yo es si pasó lo de los vinos estandarizados. Es cierto que es menos acusado que antes pero creo que seguimos funcionando por tendencias que marcan el camino de los elaboradores. Quizás mañana vuelvan los Atteca Armas jajaja

Pues tío, por eso es para mí un pelotazo, para tomarte cuando no sabes que pedir… y ahí está en la barra el barril

Jajaja, ya lo sé, maño. Me acordé de ti al mencionarlo. Pues a mí siempre me ha gustado el calabazote y la guinda confitada en repostería. Ah, ¡y con el chocolate negro en las frutas de Aragón!

No es cuestión solamente de textura, sino de sabor. El gusto que busco es austero: masa dulce (levadura), azahar, limón y punto. Bueno, el aroma de la fruta. Aquí suelo encontrar un sabor algo especiado, empezando por el relleno de cabello de ángel (cuando lo hay), por el que hay gran afición por estos lares.

No sé, igual estoy atont…[Leer más]

Sí,  pero el desequilibrio, hoy en día, es que está  en trance de desaparecer. Creo yo, vamos.

No recuerdo ver un suflé en carta desde hace… ¡Ni me acuerdo!

Como diría mi admirada Ana Vega: “Cocina viejuna“.

No creas, cada vez menos. Sólo en los sitios más vetustos, muchos de los cuales se mencionaron antes en un hilo que empezó por unos derroteros y nos ha llevado a otros.

Mira, en Ameyal que comentas, saqué estas fotos hace un par de años de “la liturgia del guacamole”:

Me encanta!!!

Y el flambeado del soufflé?

Ese sería otro debate, Javier! 😉

Con o sin fruta escarchada?

Y de la que ya no se encuentra hoy en día. Sin ir más  lejos, no habremos hablado de la importancia de la preparación en sala, hoy en día prácticamente inexistente. Desde el Steak Tartar al Crepe Suzette: ¡Que tiempos!

Sí, estamos de acuerdo, la calidad tiene un precio que hay que reconocer y valorar. Y el de la mano de obra cualificada no es menor. Lo que pasa es que la línea que separa la calidad del abuso a veces es difusa. 🤔

No, por Dios, no es que no valgan nada, es que busco un estilo. Quizá una quimera: Sobrio en sabor, simplemente la masa bien fermentada realzada con el agua de azahar. Sin más (ni menos). Textura esponjosa pero firme.

Me los he encontrado por aquí más secos y sin esa intensidad de la masa fermentada, bollería pura que tanto me gusta. Por eso es t…[Leer más]

Y cuál es “ese estilo”, Dani?

Pues oiga, yo este año comí uno del Horno de Pepet (La Cañada) que estaba de morirse!

Ya has entrao al trapo! Has picao! Jajajaja

Ufffff, preguntita. Voy a ir a lo fácil: vinos producidos en zona más hacia el atlántico que hacia el mediterráneo o la mesesta, con características similares habitualmente en cuanto a grado (bajo), acidez (alta), cuerpo (medio-bajo), concentración (baja), frescura (alta)…

Va, que entren Danis, Ruices, Decastros, Latrufas… y me vapuleen. 😉

Mi opinión es que es un inventazo, sobre todo para los sitios donde se “potea”, pues la gente que no bebe mucho alcohol no sabe bien qué pedir en un bar y otro.

Inventazo.

Por otro lado, no está mala, no es mi bebida (ni la tuya) pero no está mala.

Ey Latru, mírate aquí jaja:

Los vinos "atlánticos"… ¿una moda que pasará o va a más?