Javier

Sí, ahí llevas razón. En frente de casa de mis padres siempre se hace un charco, y eso que han asfaltado como tres veces la calle. Cuando era pequeño, en invierno, siempre helaba, ahora hace que no veo hielo la tira de años.

Saludos
Dani

Pues claro, hombre. Eso mola. Los sabores de la infancia son los mejores.

Saludos
Dani

Pero, Paco, tú crees que en tan poco tiempo lo hemos notado los consumidores.

Vamos a ver. Los vinos gallegos llevan muchos años en el mercado, pero han despuntado hace unos 5-10 años, ¿crees que en este tiempo el clima ha cambiado tanto como para percibirlo organolépticamente?

Un saludo
Dani

Otro de esos momentos en los que, tristemente nos toca existir, pero que pone de manifiesto que los pequeños negocios son necesarios.

Ayer, tras el expolio de los irresponsables asustados, quedaba género en las tiendas de barrio, en la pescadería, en la carnicería y demás.

A veces nos tiene que pasar algo malo para darnos cuenta de las cosa…[Leer más]

Ves, eso por aquí no verlo. Como mucho se freían en daditos para alguna sopa, pero en dulce ni se conoce.

No soy muy de picatostes, pero es una buena opción.

Usted es mujer para un pobre, que se decía en mi pueblo.

Pero sí, ahora, más que nunca hace falta vaciar las neveras hasta los topes aprovechando al máximo.

Saludos
Dani

Juer qué crack. Si mi madre viviera, estaría constantemente leyendo este hilo y te querría como a un hijo

Ahhhh amigo!

Entonces según vuecencia se están continentalizando por factores ajenos a la voluntá del bodeguero. Yo pensaba que quizás era algo buscado para llegar al gran público, muy muy interesante lo que dices, Paco.

No sabía lo de 2018, muy bueno jeje

Tengo que probar de nuevo, como dice @javierdecastro el Finca Genoveva, ¡a ver si me va a gustar y entonces está claro que soy yo 😉

Me gusta ese adjetivo de “afilados”, los define muy bien a muchos.

Pero oye, fíjate que uno de los que percibí cierta madurez era Cíes, y la zona no puede ser más atlántica tío, allá casi en Sanjenjo!

Jajaja, pues oye, igual son las dos cosas!

Pero tú hubieras percibido esa falta de acidez desbordante que tanto te mola

Tienes toda la razón, es la única forma de contrastarlo (a no ser que me paladar haya evolucionado y tolere más las acideces/verdores)

Voy a buscar ese Finca Genoveva que casi acaba conmigo y te cuento…

Pero entonces soy yo o no soy yo? Se contradice usté voluntariamente para inquietarme y zaherirme? XXXD

Ahhhh pues… lo que dices juega un poco mucho a favor de mi teoría… 🙂

La única forma de comprobarlo sería volver a probar los vinos que tenemos en la cabeza como bien ácidos y compararlos con nuestros recuerdos. En mi caso, recuerdo acideces límite las de los Caiño de Zárate y el Espadeiro de Attis. Y aún podríamos tener el “efecto añada” si pillamos una cálida.

Creo que esa sensación se debe a la populariza…[Leer más]

Pues tú eres consumidor de vinos gallegos desde hace tiempo, si no lo percibes juega mucho en contra de mi teoría.

¿Has vuelto a catar el Finca Genoveva recientemente?

Trataré de probar esos vinos y te digo. Igual te has hecho tú a esas acideces, pero tampoco te negaría esa percepción al 100%.

Saludos
Dani

Pues eso, que voy a ser yo, pero no sé, van varios… Arriba le explico a @javier de castro los dos últimos.

Puede ser casualidad, o que mi paladar se haya hecho a esas acideces, que antes me parecían extremas y ahora ya no… No sé. Seguiré probando 😉

Sí, tienes razón, cómo no.

Los dos últimos en los que lo he notado son los de la foto:

– Cies 2017 (Rodrigo Méndez, Meaño, allá arriba, por Sanjenjo), caiño, loureiro y espadeiro.

– Finca La Cabrita 2018 (El Paraguas, Ribadavia, entre Vigo y Orense)  mencía, souson, caiño

A ver si voy a ser yo… 🙂

Yo me voy haciendo a ellos… cada vez me gustan más, Gabriel