Entrevinos


Teléfono: 950257561
Ubicación: C/ Francisco García Góngora, 11 4006
    Almería (Almería)
    España
Horario: Cierra domingos noche y martes
Momentos:
Tipo de cocina: Actualizada y Andaluza
Web: http://www.tabernaentrevinos.net/
Precio medio: 30.00€
Tapa, bebida, producto estrella: Pulpo seco

Valoración media :  
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4 estrellas de 1 valoraciones
Valoración 4 4
Relación calidad-precio 4 4
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7 comentarios sobre “Entrevinos

  • el 26 mayo, 2022 a las 19:35
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    … que me fui a Almería a calzón quitao. Con nada preparado. ¿Y dónde ceno algo un lunes? Pues no hay mucho escrito, no vayáis a creer. Porque las Tripa Azbaisor & the likes, como que paso. Afortunadamente encontré un artículo de Jorge Guitián que me hizo el día (y las cenas ^__^ )

    Esta primera noche fui a este lugar que abre los lunes. Está un poquillo retirado del centro. A ver, nada significativo, 500 metros como mucho de la principal avenida, pero vaya, que no está en el cogollocogolludo.
    El nombre promete, pero enópatas semos y en el camino nos encontraremos y ya nos conocemos. Tiene algunos vinos por copas, alguna botella… no es un punto fuerte, pero nuestro sesgo quizá no es el idóneo. Por lo que observo en otras mesas sí hay trasiego de vinos. A mi, la verdad, no me apetecen demasiado, será el calor.

    Amos a comer algo (con cerve sin alcohol). Aquí son de tapa con la consumición, y además parece que es natural darte a elegir la tapa. Tienen como siete u ocho distintas. Tiro por lo que me parece más local (tienen alguna concesión internacionalista que me hace enarcar las cejas hasta en la foto del DNI), más puchero, más sarteneo, más… ¡venga una de patatas con pulpo! Bien rica tras el ajetreo del día. A ver, estamos en una taberna, no me vengáis a pedir espumitas ni rayajos de reducciones ni milks-in-vinegar. Llego motivao con el asunto pulpo, que parece ser algo local. En concreto el pulpo seco y, tras leer la carta (y habia algunas cosas que me resultaban muy apetecibles) y “enhabiendo”, de cabeza. Me advirtieron: Va a tardar. Sea, un día es un día y seis media docena. Y tardó, pero advertido estaba.
    Pues llegó un plato largo con el tentáculo completo, troceado manteniendo la forma, acompañado de unas patatas “casi-arrugás” y algo de col moderadamente encurtida; y que también me pusieron un cancarro de all i oli (que yo creo que era de bote, pero no pasa ná) y una bandeja de panes bien ricos (os cuento después)…

    … excelente el pulpo seco. Amos a ver, no tengo referencias, pero me gustó mucho. Si os gusta el pulpo blandito, a feira-madrileña y tal, pues no va a gustar, porque este pulpo hay que masticarlo majos. Tiene su momento de blandura, sí, pero también es firme y la parte exterior crujiente; y es este un punto buscado en el horno/llama, según pude ir aprendiendo esos días.

    Pues este despliegue de felicidad octópoda, con una cerve sin alcohol, y una copa de Juan Gil (3,7 EUR y es que comerme ese pulpo así, sin vino, me parecía incivilizado) fuese por unos felices 31,1 EUR

    Nota: Mientras esperaba al pulpo me trajeron el all i oli y unos panes rebanados bien gruesos (y lo digo como algo positivo; el pan se corta grueso ¡no seáis miserias!), que vi cortar con estos ojos que se han de comer los gusanos. Nunca me espero nada bueno en lo que se refiere al pan. Cogí un trozo de uno que tenía pinta de cúrcuma y “pipas” y… oye, pues está bien. Probé el “plain-regular-in-de-nait”… oye, que estos panes están buenos. ¡Albricias! Tal es así que al terminar le pregunté a la amable camarera por ellos. Son de una panadería local, llamada Obrador Las Pitas y sí, son panes que merecen la pena y un oasis panarra.

    Valoración 4
    Relación calidad-precio 4
    • el 27 mayo, 2022 a las 07:14
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      Me encanta el pulpo seco.

      No lo había oído en mi vida hasta que con 35 años aprox me vine a vivir a estas tierras levantinas, y un día me invitaron a comer en un chalecito cerca de Denia, y el anfitrión sacó un pulpo seco que tenía ahí colgao, hizo unas brasas, lo puso con unas tenazas a fuego vivo un minutillo, lo puso encima de una cortada de hogaza, lo regó con un aceite fuertote de la zona y me dio mi “montadito”, ¡juerrrrrrrrrrrrrrr, qué manjar!

      • el 27 mayo, 2022 a las 07:20
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        Miento, lo había probado, pero no así.

        Ahí va otra batallita: un día, con 25-30 años, fui a casa de un amigo a pasar un finde a Zestoa y me llevó una mañana a pescar pulpos a mano a Zumaia, ahí, bajo el imponente flysch, pero andando por las rocas costeras, nada de barcos. Y oye, pillé uno, que sensación más rara (más bien me pilló el a mí, yo metí la mano con el puño cerrado y me la envolvió, solo tuve que retirarla y acercársela a mi amigo para que lo despegara de mi mano).

        Bueno, el caso es que dije, “¡qué bien, ¿cómo nos lo comentos?”. Y me contestó que quietoparao, que era para hacerlo seco. Llegamos a casa, lo colgó en la terraza, y ahí debió estar unos meses. Con él hacía patatas con pulpo y otras cosas que no recuerdo, yo probé las patatas con otro pulpo que tenía por ahí seco. Saborazo, consentrasao.

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