La Salita



Ubicación: Carrer de Pere III el Gran, 11
       Valencia (Valencia/València)
       España
Código Postal: 46005
Teléfono: 963817516
Horario: Cierra martes y miércoles
Menciones: 1 Estrella Michelin y 3 Soles Repsol
Tipo de cocina: Creativa, De autor, y Mediterránea
Te puede interesar: Con encanto y Con terraza
Web: https://lasalitarestaurante.com/
Precio estimado: 175,00€

Valoración media :  
5 stars   3
4 stars   0
3 stars   0
2 stars   0
1 stars   0
5 estrellas de 3 Valoraciones
Cocina 5 5
Servicio 5 5
Local 5 5
Servicio del vino 5 5
Relacion calidad-precio 4 4
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5 comentarios sobre “La Salita

  • el 24/08/2024 a las 12:31
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    Los 3 Soles Repsol de este 2024 le han sentado de maravilla a Begoña y su, mi, La Salita.

    Son muchos años yendo, y es que me siento en casa, conozco a muchos del equipo, aunque se va renovando como es lógico, y son todos unos pedazo de profesionales.

    Pero es que además de sentirme en casa, le tengo un cariño bárbaro, a Begoña, a su, mi, La Salita, y a su equipo, en especial a Sergio (a quien que ya no veo casi nunca, pues está mayor ? y lo ponen “de mañanas”) y a Jorne, qué bien me lo paso con él y qué bien bebo siempre dejándome llevar por sus sabios consejos.

    Ir a La Salita es un acontecimiento, es un día de fiesta, es una liberación de endorfinas sostenida durante la 3 o 4 horas que estás. Chico, qué bien. Pero qué bien.

    Y cada vez que vas, notas que Begoña, crece, y crece, y evoluciona, y evoluciona. Que si los tubérculos y raíces, que si el mundo de los vinagres, que si el de los embutidos vegetales, que si la recuperación y actualización de platos y postres tradicionales valencianos…

    ¿Pero se puede cocinar más bonito, más delicado, más original y más rico? Lo de delicado, rico y sabroso, no soy capaz de trasladároslo, lo de bonito… pinchad la foto de abajo y mirad que obras de arte.

    En esta ocasión pedimos el menú corto, Menú La Gaira, pero… tuneado con algún extra, quedando así la cosa:

    ————————-
    Nigiri de tonyina picante
    Ensaladilla de ostra
    Sándwich de pastrami
    Berlina de huevo frito
    Maki crujiente, coliflor, calamar y beurre blanc
    ———-
    Sardajo de almendra fresca & pescado azul & fósil
    Macarrones “Disfrutar“ en honor al mejor rte del mundo
    Halófilas, merluza de pincho y su colágeno
    “All i pebre” blanco
    La chacinería vegetal: Caña adobada de nabo / Pastrami ahumado de rábano sandía / Sobrasada de calabaza / Paté de setas
    Chirivía, “Tot de Poble” y crema de repollo fermentado
    Panceta ibérica, mejillón y caldo escabechado de manitas
    ———-
    Taco mexicano
    Burbujas de “Hoya de la Iglesia”, cremoso de higos e higos salteados en Tintoralba
    Carro de dulces valencianos
    ————————-

    PPPPFFF, que exaltación de los sentidos.

    No me voy a extender para no redundar, si os interesa saber más, podéis leer las dos reseñas de debajo de esta, de abajo a arriba, en las que me empleo y doy una visión detallada de este grandísimo restaurante.

    Yo sólo sé que no hace nada de este festín, y ya estoy pensando en cuándo volver a La Salita, cuándo volver a sumergirme en una velada mágica y onírica, cuándo volver a tomar ese cocktail y ese aperitivo en ese jardín de ensueño, cuándo subir a esa maravillosa sala de esa soberbia casona valenciana del S XVIII…

    Por cierto, ¿sabéis (yo me enteré en esta última visita) que puedes ir SIN RESERVA al jardín de La Salita y tomarte un cocktail (son más que cocktails, son “cocina líquida”) del gran Denys Chercasov… y degustar alguno de los platos icónicos de Begoña Rodrigo (la Tiara, las Berlinas de anguila y huevo frito…) a modo de tapas y tal? ¡Qué peligro! Uy, uy, uy

    Valoración media 5 5
    Cocina 5 5
    Servicio 5 5
    Local 5 5
    Servicio del vino 5 5
    Relacion calidad-precio 4 4

  • el 12/02/2022 a las 23:36
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    Otro año más en La Salita, otro año más de celebración, otro año más de placer.

    No para de crecer. Este año no notamos un tirón especial de creatividad (aunque por supuesto la creatividad fue desbordante, estamos hablando de Begoña Rodrigo, oigan), sí que percibimos una consolidación en su propuesta vegetal. Sí que notamos un tirón, un tironaco, en embrujo, en terciopelo. Acariciante, pulido, redondo este pase de febrero de 2022. Ni un fallo, ni un desliz, ni un descontrol de temperatura.

    Sobre ruedas. Armonía. Cocina y sala en acompasada danza. Plasticidad.

    Menú Sangonereta
    —–
    Ensalada Caprese
    Caballa y nabo daikon
    Tomate escabechado
    Taco con pulpo y aguacate
    Brioche vegetal

    —–
    La Tiara
    Yema de huevo, guisante lágrima, lenteja de aceite y caviar
    Anguila ahumada, almendra y manzana
    Merluza de Celeiro con su pil pil
    Lenteja beluga con calamar y caviar
    Menestra de verduras con fondo marino
    Marmolado de vieiras con crema de piñones tostados
    Salmonete, tirabeque y all i pebre
    La Sarandonga
    Tatin de raíz de apio con foie y trufa
    Carbonara de chirivía
    Brioche con tartar de ciervo
    Salsifí, topinambur, bechamel de manitas y trufa

    —–
    Melocotón de Calanda, yogurt y hierba Luisa
    Calabaza y naranja

    BEGOÑA, Jesús, Jorne, Miguel, César… ¡qué grandes!

    (Más info en la reseña de abajo)

    Valoración media 5 5
    Cocina 5 5
    Servicio 5 5
    Local 5 5
    Servicio del vino 5 5
    Relacion calidad-precio 4 4

  • el 13/12/2020 a las 09:29
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    Begoña Rodrigo por fin tiene lo que se merece: Un localazo a la altura de su valía y de su cocina. Y yo por fin he ido, lo tenía en el debe, me torturaba la idea de que aún no había visitado La nueva Salita (jeje, cuando me pongo melodramática…)

    El local, y mira que había visto fotos, me dejó boquiabierto, ¡qué bonito! Por cierto, ¿he dicho local? No está bien expresado, pues es una casa entera del delicioso barrio de Ruzafa, con una terraza jardín espectacular.

    En esta primera visita a La nueva Salita, el local (que no, que no es solo un local) adquiere gran parte del protagonismo. Se trata de una casona valenciana del siglo XVIII rehabilitada con muchísimo criterio, respetando elementos originales y estructuras, y decorada con gusto y clase, con el predominio de las flores y plantas secas como elemento distintivo. Así, te ves envuelto en una atmósfera como de otra época, glamurosa y cool a la par que rústica, con esas escaleras de ensueño, esos baldosines hidráulicos, esos mimbres, esas maderas, esas paredes blancas inmaculadas…

    En cuanto a la cocina, pues Begoña sigue en su línea evolutiva ascendente que se marcó hace unos años, con gran atención y trabajo de verduras y tubérculos sin renunciar en absoluto a las buenas carnes y pescados, sin complejo alguno, con la frescura y sabor como coprotagonistas de todos sus pases, y sus emplatados tan “begoñita”, delicados, estéticos, plásticos, visuales, personales.

    Percibí la presencia de más “productazo” que en otras ocasiones, caviar, ostra, percebe, gamba roja…

    Tiene tres menús degustación, uno veggie, y dos digamos “normales”, uno más largo que otro. Optamos por el largo, que ya no se llama “La Rodrigo” sino “Narciso”.

    ———————————
    Aperitivos:
    Aguacate en salmuera, crème fraìche de puerros y huevas de salmón
    Careta de cerdo con brandada de bacalao
    Berlina con huevo frito y anguila
    Champiñón saté
    Maki de coliflor encurtida, majada de perejil y calamar con beurre blanc de cítricos
    Tartar de navaja

    —————
    La Tiara
    Ensaladilla de ostra
    Sardajo / Sardina y Berenjena ahumada
    Sarandonga / Guisantes y Cigala
    Menestra de verduras y percebes
    Las algas y el sepio valenciano
    Gamba roja a la sal
    Lenteja de aceite y all i pebre
    Suquet de bogavante
    Merluza de Celeiro / Caviar
    Berberechos y piparras
    Tallarines vegetales
    Ravioli guisado de vaca

    —————
    Postres:
    Cóctel de invierno
    Calabaza / Naranja / Parmesano
    Chocolate / Torrefactos / Maíz

    ———————————

    El menú-degustación Narciso comienza con unos aperitivos, permítanme que redunde, muy ”begoñita” en su presentación, tan suyos, pero modernizados, ya no hay carritos ni barracas; continúa con los pases centrales, mezclándose en esta fase los entrantes y los principales, no hay una sucesión clara de los mismos excepto en el último; pasamos a los postres, tres, aquí sí que hay sucesión clara basada en la intensidad; y finalizamos con los petit-fours, y vuelvo a redundar… tan… ¡tan “begoñita”! Esta vez sigue la línea conceptual y estética de la casona y los presenta unos en una quesera clásica y otros colgando de un matojo de flores secas. Divino de la muerte.

    Nos agasajó a mitad de menú con una nueva creación, un pastrami sabrosísimo, a base de carne de ciervo y remolacha curada y trabajada largamente. Qué bomba.

    El tema vinos es top – top, y encima tuvimos el placer de vivir “El retorno de Jorne”, qué crack, qué clase tiene este sumiller llamado Jorne Buurmeijer, qué puntazo le da al tema con su exotismo, su empaque y sus conocimientos.

    Y el servicio, pues más de lo mismo, de 10, con nuestro ya amigo y muy querido Sergio Rodrigo dirigiendo la orquesta, me dijeron que estaba de vacaciones, pero o se trataba de un holograma o vaya modo de pasar las vacaciones oye, trabajando en La Salita, eso ya es vicio 😉 y con Jesús Eres de Jefe de Sala, un privilegio escuchar cómo canta los platos, de qué modo tan pedagógico, hubo alguno que estuve a punto de coger notas, nos embelesó. Echamos de menos a Miguel y a Ismael, no andaban por ahí ese día.

    En fin, que un placer siempre ir a la Salita, sales de ahí lleno de “calorcito”, a gusto y reconfortado, cargado de buenas vibraciones. Y ahora ya es que es el no va más al coronar el pastel con esa guinda del nuevo emplazamiento tan soberbio.

    Valoración media 5 5
    Cocina 5 5
    Servicio 5 5
    Local 5 5
    Servicio del vino 5 5
    Relacion calidad-precio 4 4

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